Después de varios años me he dado cuenta de como fueron las cosas en mi adolescencia. La única mujer que debí haber valorado no lo hice así, decidí tomar el camino de la aceptación social y ser un borrego infiel antes que navegar infinitamente de manera leal con esa chica. Pensaba que ser el típico adolescente malote era lo mejor, era una forma que me permitiría sentirme aceptado por todos y por todas, pero en realidad el camino no era ese. No valoré a la mujer que me dio a entender que no siempre tengo la razón, la mujer que me decía que aunque tenía un ideal "nazi" me iba ha querer y que mis pensamientos políticos no serían problema para nuestro amor. Yo le decía que el amor que proyectaba en ella estaba completamente por encima de mi EGO, pero al parecer mi EGO gano al amor que le tenía... Le traicioné, me reí de ella y la humille, después de ella haberme enseñado a convivir en una relación. Me decía muchas más cosas de las que antes escribí, pero prefiero guardármelas para mi. No me victimizo pero me arrepiento de todo aunque decir eso no me será de perdón. Elegí el bando equivocado en el amor y entendí su función años después gracias a esa chica. Fue la primera en mi vida y la única de verdad, pero ese yo del pasado era otro completamente.
Estuve con otras chicas y habiéndome dado cuenta de mi aquél error opté por "cambiar" y comencé a valorar a las que no debí haber valorado. Me traicionaron constantemente sin ningún tipo de sentimiento, hasta que me di cuenta de que yo fui como ellas.
Quizás la vida me podría haber dado un poco de tiempo para realizar mi cambio, pero no pudo ser así. Mi cambio en el amor, porque lo demás siempre tuve claro lo que quería. Nunca tuve dudas sobre mi ideología, nunca tuve dudas sobre mi amor a mi familia, pero si en el amor.
Ahora sé como tomar las riendas, se como reaccionar a las distintas situaciones. Valoro lo que merece ser valorado y admiro la lealtad. Solo una mujer me fue real, y yo desleal. Cuando fui real, me fueron desleal, por lo tanto la vida demuestra que no existe el bien común, solo el individual. Yo bien y tú mal, tu bien y yo mal. En conclusión, el aspecto del amor está idealizado y la lealtad también.
Estuve con otras chicas y habiéndome dado cuenta de mi aquél error opté por "cambiar" y comencé a valorar a las que no debí haber valorado. Me traicionaron constantemente sin ningún tipo de sentimiento, hasta que me di cuenta de que yo fui como ellas.
Quizás la vida me podría haber dado un poco de tiempo para realizar mi cambio, pero no pudo ser así. Mi cambio en el amor, porque lo demás siempre tuve claro lo que quería. Nunca tuve dudas sobre mi ideología, nunca tuve dudas sobre mi amor a mi familia, pero si en el amor.
Ahora sé como tomar las riendas, se como reaccionar a las distintas situaciones. Valoro lo que merece ser valorado y admiro la lealtad. Solo una mujer me fue real, y yo desleal. Cuando fui real, me fueron desleal, por lo tanto la vida demuestra que no existe el bien común, solo el individual. Yo bien y tú mal, tu bien y yo mal. En conclusión, el aspecto del amor está idealizado y la lealtad también.