Según Freud en la niñez es la etapa donde el ser humano manifiesta la perversión que lleva inherentemente dentro de sí. Estoy de acuerdo, cuando tenía 6 o 7 años me gustaba torturar pequeños animales, ver cómo sufrían y después matarlos sin la más mínima pizca de remordimiento; además, fue en esta época donde descubrí los estímulos que resultan de frotarse suavemente en el aparato reproductor. Fueron años extraños que me convirtieron en el enfermo que soy ahora (como todos en el foro) y puedo decir que a parte de mi caso, habrá muchos más que avalen la teoría del buen Freud.